El Ibex sube el 76% desde los mínimos de julio de 2012, periodo en el que las compañías han limpiado sus balances. Gamesa, Bankinter y ACS lideran las alzas con subidas del 768%, el 365% y el 316%.
La Bolsa está estos días de aniversario: hace justo dos años, el 24 de julio de 2012, el Ibex marcaba un mínimo en los 5.956 puntos y la prima de riesgo escalaba a un máximo nunca visto, los 638 puntos básicos. Ese día supuso un punto de inflexión para el mercado. Desde entonces, el selectivo acumula una subida del 76,52% y el diferencial del bono español a 10 años respecto a su homólogo alemán se encuentra en la zona de los 130 puntos básicos.
¿Qué ha pasado para que la situación actual sea tan distinta a la de entonces? Dos días después de los mínimos bursátiles y los máximos de la prima de riesgo, el presidente del BCE, Mario Draghi, pronunció unas palabras que calmaron de inmediato los mercados: «El BCE hará lo necesario para sostener el euro. Y créanme, eso será suficiente».
Victoria Torre, de Selfbank, afirma que estas intenciones de Draghi «marcaron un antes y un después». Además, «pocas veces una ayuda ha salido tan barata», explica la analista, pues «ningún país ha hecho uso de la ayuda del BCE en forma de compra de bonos, pero la sola idea de ese apoyo sirvió para tranquilizar los ánimos».
Precisamente, uno de los factores que en estos dos años ha apoyado a los mercados es la actuación de los bancos centrales. La Reserva Federal, el BCE y el Banco de Japón han contribuido a devolver parte de la confianza perdida. Los gobiernos también forzaron la máquina, a menor velocidad, pusieron los cimientos de la unión bancaria, configuraron los sistemas de rescate, entre otras reformas.
Tomás García-Purriños, de Cortal Consors recuerda que «el mercado, por aquel entonces, daba una probabilidad muy alta a un hecho que muchos analistas veíamos que era imposible que sucediese», y sentencia que, al final, «se han cumplido nuestras expectativas: el euro no se ha roto».
Saneamiento empresarial
Las compañías, por su parte, han aprovechado este tiempo para lavar su cara. Pablo Iturriaga, de Tressis, apunta al esfuerzo de las empresas del Ibex en ampliar su negocio exterior, «sobre todo en los emergentes, que aportan alrededor del 35% de los ingresos». También resalta la reducción de la deuda gracias a un abaratamiento de los costes de financiación derivado de las políticas monetarias expansivas del BCE. El saneamiento corporativo se completó con un recorte de los costes de personal, según el experto, que asciende a un 11% desde el año 2009, factor que ha redundado en una mayor competitividad. Susana Felpeto, de Atl Capital, afirma que las medidas tomadas por las compañlías han logrado una mejora notable de los márgenes, pero que a partir de ahora, el mercado necesitará ver «un crecimiento de los beneficios, y para ello, es necesario que el entorno macroeconómico siga mejorando».
El panorama macro nacional presenta una cara bien distinta a hace dos años, pero aún dista de disfrutar de buena salud. Antonio López, de Banca March, reconoce la buena salud del sector turístico es positiva; la debilidad del consumo ha tocado suelo, y los datos de paro dan síntomas de mejora. Pero alerta de que el gasto de los hogares segirá bajo y que la deuda pública es preocupante. Por eso surgen las dudas de si es posible que vuelvan los fantasmas. Torre detecta algunos focos de riesgo, pero descarta una vuelta a la situación de 2012. «Un empeoramiento de la situación geopolítica, con un encarecimiento significativo del crudo, podría lastrar la recuperación», señala la experta, que también apunta a la crisis de Espírito Santo y los rescates de Chipre y de Grecia «que siguen encima de la mesa, pero no como hace dos años».
Los líderes de la Bolsa
En este escenario de mejoras económicas y de sentimiento de mercado, el dinero entró con fuerza en los valores del Ibex, que, menos Bankia y ArcelorMittal, suben desde entonces. De los 35 integrantes del selectivo español, 14 valores suben más del 100%, mientras cinco, se han revalorizado más del 150%. Viscofan es la compañía que menos se ha revalorizado desde los mínimos de julio de 2012: sus títulos ganan un 20%.
Gamesa
Gamesa es el valor del Ibex que más ha subido desde que el índice tocara suelo hace dos años, con una ganancia del 768,77%. Esta escalada bursátil responde, según los expertos, a la mejora del negocio de aerogeneradores, que tradujo en la vuelta a beneficios en el primer trimestre de 2013.
Recientemente, Gamesa publicó un beneficio neto semestral de 44 millones de euros, casi el doble que en el mismo periodo del año pasado y por encima de las previsiones de los analistas. Tras anunciar sus cuentas, Banco Sabadell y Société Générale revisaron al alza sus recomendaciones sobre el valor a comprar, mientras Renta 4 subió su precio objetivo a 10,7 euros, que implica un potencial del 16%. La consecución de contratos a lo largo del año ha dotado al valor de una visibilidad en sus resultados con la que no contaba en plena crisis, según coinciden algunos expertos.
Bankinter
Bankinter ha sido la estrella del sector bancario en esta fase de recuperación bursátil con un alza del 365,66%, la segunda mayor del Ibex. Su escasa exposición al sector inmobiliario ha sido determinante en el apoyo del mercado al valor.
Enrique Zamácola, de Link Securities, ve en la baja morosidad de Bankinter un punto a favor de la entidad, ya que le permite volver a dar créditos para impulsar su negocio. El experto valora positivamente el equipo gestor del banco. Además, la entidad es la única que cuenta con el visto bueno del Banco de España para poder destinar más del 25% del beneficio a retribuir al accionista debido a la solidez de su balance. Su rentabilidad por dividendo prevista para este año es del 2%, según el consenso de Bloomberg.
Sacyr
Como el resto del sector constructor, sufrió en Bolsa con la crisis económica y los recortes presupuestarios de los gobiernos españoles, sobre todo en obra pública. Pero ha sabido afrontar la situación y se anota, desde los mínimos de hace dos años, el 316,16%. La compañía, se gun los expertos, está en pleno proceso de reducción de su deuda. Además, va a vender su participada Itínere, que no tiene deuda.
Por otra parte, su participación en Repsol le ha dado alegrías en los últimos meses, después del dividendo extraordinario que abonó la petrolera por la monetización de los bonos argentinos recibidos por la nacionalización de YPF. En el primer semestre, los dividendos de Repsol aportaron 47 millones de euros, que suponen el 32% del beneficio bruto de la constructora. También ha conseguido superar una de sus incertidumbres: el sobrecoste en la obra del Canal de Panamá.
ACS
La compañía presidida por Florentino Pérez es el cuarto mejor valor del Ibex desde el suelo de la crisis con un alza acumulada del 192,71%. Es una de las compañías del sector más internacionalizadas (España sólo representa el 18% de sus ventas). Los analistas destacan su equilibrado perfil geográfico, en el que cada área representa alrededor del 30%. Es la constructora preferida de Rafael Fernández de Heredia, de Beka Finance, puesto que permite al inversor «apalancarse a la recuperación económica en España con su filial de servicios industriales».
Otro punto a favor del valor, según el analista, es que «podría completar este año la reestructuración de su filial Hochtief y la reorganización financiera del grupo, destinada a reducir el coste financiero». Por último el experto cree que el circulante dejará de ser un problema y que ACS será capaz de aprovechar el fuerte crecimiento esperado de la inversión de infraestructuras a nivel mundial.
Gas Natural
La gasista completa el quinteto de campeones de la recuperación bursátil con su revalorización del 163,70% en dos años. La compañía acusó, igual que el resto del sector, las dudas que generó la reforma del marco regulador energético por parte del Gobierno. Pero, una vez que el Gobierno desveló la nueva normativa, el valor tuvo vía libre para subir apoyado en la visibilidad de sus resultados y en una atractiva y sostenible rentabilidad por dividendo del 4,1%, según estima el consenso del Bloomberg para el conjunto de este año.
Luis Padrón, de Ahorro Corporación, reconoce que el conflicto de Ucrania y Rusia podría favorecer a la compañía de forma indirecta, puesto que provocará una subida de los precios del gas. La española podrá trasladar a sus clientes estas alzas, puesto que sus contratos recogen esta posibilidad.
Los máximos históricos son aún un espejismo
Los expertos hablan del futuro con optimismo, pero tampoco lanzan las campanas al vuelo. Tomás García Purriños, de Cortal, cree que la Bolsa se apoyará en los próximos años en la mejora de los datos económicos en su escalada alcista, lo que se notará en la prima de riesgo. Pero cree que la recuperación será lenta.
«Para 2015 esperamos que el Ibex llegue a los 12.400 puntos. Es un 18% por encima de los niveles actuales, pero aún está lejos de los máximos del 8 de noviembre de 2007 en 15.945 puntos». Antonio López, de Banca March, recuerda que los mercados son cíclicos y que la Bolsa sí que batirá su propio récord, eso sí «lo difícil es saber cuándo». De momento, a medio plazo es complicado, porque aunque la recuperación del 76% desde los mínimos de julio ha sido rápida, «lo normal es que las caídas sean rápidas y la vuelta a la senda alcista sostenible, lenta». López cree que el año que viene será clave para que el mercado español enfile el camino a máximos. «Los resultados empresariales deben mejorar mucho, situación que no se producirá a medio plazo», explica el experto, que augura un camino alcista plagado de volatilidad. A Pablo Iturriaga le parece impensable hablar del 16.000 a día de hoy, pero matiza que, con dividendos, el selectivo español está a un 6%,de máximos, «lo que se traduce unos 12.000 puntos de Ibex».
Susana Felpeto ve atractivo en algunos valores que estuvieron en el ojo del huracán en los momentos difíciles y que pueden brillar en la nueva etapa alcista. Bankia es uno de ellos, ya que «con la reestructuración, el banco está fuerte». La experta reconoce que de mejorar la macroeconomía española «tendrá un buen comportamiento». Su punto de inflexión, al igual que el resto del sector, será cuando fluya el crédito. También apuesta por ArcelorMittal, que despuntará al calor de la recuperación de la demanda mundial. Y añade a Ferrovial, que «tiene muy controlado el riesgo de sus proyectos y cuenta con una buena generación de caja».